¿Qué es?
Es una enfermedad infecciosa transmitida por garrapatas. Su agente etiológico son unas bacterias conocidas como borrelias.
Las garrapatas infectadas con esta bacteria se encuentran sobre todo en la zona norte de la península ibérica, se limitan a hábitats concretos con alto nivel de humedad. Sin embargo el riesgo de contraer la enfermedad es limitado. Sólo alrededor del 10% de los pacientes se infectan y el 1% desarrolla al enfermedad tras la picadura de una garrapata portadora del agente infeccioso.
¿Cuáles son sus etapas?
- Etapa 1, llamada enfermedad de Lyme temprana y localizada. La infección aún no se ha propagado por todo el cuerpo.
- Etapa 2, la bacteria ha empezado a propagarse por todo el cuerpo. Enfermedad de Lyme de diseminación temprana.
- Etapa 3, llamada la enfermedad de Lyme de diseminación tardía. La bacteria se ha diseminado por todo el cuerpo.
¿Cuáles son los factores de riesgo?
- Caminar en pastizales altos.
- Realizar actividades al aire libre en una área donde se sabe que se presenta la enfermedad de Lyme.
- Tener una mascota en casa
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas de la enfermedad de Lyme temprana y localizada comienzan días o semanas después de la infección. Estos síntomas son similares a los de la gripe;
- Dolor de cabeza
- Dolos articular
- Malestar
- Fiebre y escalofrios
- Dolores musculares
- Rigidez en el cuello
También se puede presentar una erupción , una mancha roja y plana en el sitio de la picadura de la garrapata, con un área claro en el centro. La lesión suele ser bastante grande. Se conoce con el nombre de eritema migratorio.
Los síntomas pueden aparecer y desaparecer. Si no se trata dicha enfermedad la bacteria puede diseminarse al corazón, al cerebro y a las articulaciones.
En la enfermedad de Lyme de diseminación temprana, los síntomas pueden ocurrir semanas o meses después de la picadura, algunos de ellos son;
- Parálisis o debilidad en los músculos de la cara.
- Entumecimiento o dolor en la zona del nervio.
- Problemas del corazón, tales como palpitaciones irregulares, dolor torácico o dificultad para respirar.
Los síntomas de la enfermedad de Lyme de diseminación tardía, pueden ocurrir meses o años después de la infección. Entres los síntomas más comunes se encuentran;
- Dolor articular y muscular
- Debilidad muscular
- Entumecimiento y hormigueo
- Problemas de habla
- Movimiento muscular anormal
- Problemas de pensamiento
¿Cómo se diagnostica?
El diagnóstico de esta enfermedad se puede establecer mediante una exploración física del paciente.
También se puede hacer un análisis de sangre para verificar la presencia de anticuerpos contra la bacteria que causa la enfermedad. El más utilizado es el ELISA para la enfermedad de Lyme.
Otros exámenes que se pueden hacer cuando la enfermedad se ha propagado son;
- Ecocardiografía
- Electrocardiograma
- Resonancia magnética del cerebro
- Punción raquídea
¿Cómo se trata?
Es necesario comenzar el tratamiento cuanto antes para evitar un curso grave de la enfermedad.
Es necesario comenzar el tratamiento cuanto antes para evitar un curso grave de la enfermedad.
Durante la fase temprana la mayor eficacia se obtiene mediante un tratamiento con antibióticos de dos semanas de duración. El fármaco de elección puede ser la doxiciclina. En el caso de los niños y las mujeres embarazdas recibirán amoxicilina o cefuroxima.
En estadios más avanzados de la enfermedad, se emplean antibióticos del grupo de las cefalosporinas administrados por vía intravenosa. El tratamiento durará entre tres y cuatro semanas,
El contagio de las bacterias de persona a persona no es posible. Por ello no es necesario tomar medidas preventivas especiales al estar en contacto con personas infectadas.